La hepatitis crónica B afecta a unas 250 millones de personas en el mundo y puede evolucionar a cirrosis o a cáncer de hígado.
El hígado graso es una de las enfermedades más frecuentes y afecta al 25-30% de la población mundial.
La infección crónica por el virus B de la hepatitis es un problema de salud mundial.
Nuevos ensayos publicados con pacientes de Hepatitis B sugiere el uso de nanopartículas de liposoma con antígenos del virus para su tratamiento.