Los anticonceptivos orales son muy utilizados para el control de la natalidad y para la regulación hormonal, pero no están exentos de toxicidad. Su uso se asocia con la aparición de hiperplasia nodular focal, que es una forma benigna de enfermedad hepática en la que se recomienda la interrupción de los anticonceptivos orales. Sin embargo, se desconoce si la utilización de los anticonceptivos se puede asociar al desarrollo de hígado graso.
En el congreso anual de la Asociación Americana para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas se ha presentado un trabajo realizado entre los años 2010-2020 en mujeres entre 21-45 años de edad en el que se estudiaba la posible presencia de hígado graso
Las mujeres que presentaban hígado graso se comparaban con mujeres sin esta enfermedad con características similares en cuanto a la edad, el nivel socio-económico y la localización geográfica. Se identificaron un total de 521.125 mujeres con hígado graso durante los 10 años que duró el estudio y se comprobó que el uso de anticonceptivos orales se asociaba significativamente al diagnóstico de hígado graso.
Teniendo en cuenta estos resultados, él Dr. Carreño y los médicos de La Fundación consideramos que las mujeres que toman anticonceptivos orales deben evitar otros factores de riesgo de aparición de hígado graso, siendo recomendable la realización de ejercicio (al menos 3 horas por semana), no consumir alcohol, no fumar y el control del peso.